Hoy hace exactamente una semana que me vine a vivir lejos del calor materno. Se positivamente que tú, que me estás leyendo, pasaste por esto hace muchos años, pero para mí es una novedad. Y podrás entender que, con lo que me ha costado dar este paso, estos primeros días han sido de una felicidad tremenda. Y no por nada en especial, al fin y al cabo más de 10 horas diarias las paso fuera de casa, pero los ratitos que he tenido para mí, que tengo para mí, ahora mismo son impagables.
Egoístamente no he querido compartirlos con nadie. Hay más días que ollas, que decía mi padre. Necesitaba sentir esa libertad que te da el estar en tu propia casa, sin rendir cuentas a nadie, si voy, si vengo...Lógicamente, también he encontrado sus problemas. Por mucho que he implorado al duende mágico de la limpieza que apareciera por mi hogar a echarme una mano, no ha habido manera, así que no me ha quedado más remedio que asumir todas las tareas del hogar. Ni siquiera la de la lejía Neutrex que viene del futuro se me ha aparecido, manda huevos...
Pero es un mal (muy) menor, porque todo lo demás son ventajas. Por supuesto que echo de menos a mi madre, y más ahora que no está pasando precisamente por su mejor momento, pero también soy consciente que, cuanto más se echa de menos a una persona, más reconfortante es el volver a encontrártela. No en vano, he ido un par de días a comer a su casa esta semana....la cual ya no siento mía. Es todo muy diferente, el primer día, inconscientemente hice lo primero que hacía antes siempre que llegaba a casa: descalzarme y ponerme las zapatillas de casa...pero ya no estaban ahí.
Queda mucho por hacer todavía en mi nuevo hogar, pero no me meto prisa. La situación en el trabajo parece que poco a poco se va estabilizando, lo cual me quita una de mis grandes preocupaciones, pero soy consciente que todo se puede volver del revés en cualquier momento, aunque creo que lo peor ya ha pasado.
Sólo me queda decir GRACIAS. Gracias a todos los que me habéis apoyado en este paso. Gracias incluso a los que pensábais que nunca lo daría :) En breve retomaré mi vida social, de momento estoy disfrutando de mi hogar. Me voy a fregar los cacharros de la comida....
viernes, 25 de febrero de 2011
viernes, 18 de febrero de 2011
Primer día de mi nueva vida
Ya estoy, por fin, instalado en mi casa. Faltan cosas por traer, lógicamente, pero lo que tengo sobrepasaría ampliamente cualquier kit de supervivencia.
Las sensaciones vuelven a ser confusas. Tras un primer momento de euforia, un segundo de cabreo porque el p... ordenador no quería arrancar, y un tercero de bienestar, la melancolía ha vuelto a hacerse un hueco en mi cocorota. Ayer me pasé todo el día pensando cosas en plan...esta es la última vez que... Me siento extraño todavía. Supongo que es cuestión de tiempo, pero me doy cuenta de que algo ha cambiado porque hago cosas que nunca hacía. Un ejemplo estúpido es el haberme puesto la radio de fondo. Jamás en mi vida lo había hecho, salvo esporádicas visitas vía web, pero hoy ha sido lo primero que he hecho una vez me he puesto cómodo. Supongo que es una inconsciente búsqueda de compañía...
La cama no me gusta. Es pequeña y blanda, por lo que pasa a ser prioritario el cambiarla. El sofá, tres cuartos de lo mismo, aunque en este caso ya tengo mirado su relevo. Pienso continuamente en qué estará pensando mi madre. Se me pasará, lógicamente, pero ahora no puedo evitarlo. Me ha apoyado y me ha empujado a dar este paso, pero los últimos días evitaba el tema, supongo que es normal. Para ella también va a ser su primera experiencia viviendo sola...
En fin, que es sólo el primer día del resto de mi vida, y ya no hay marcha atrás. No, no me arrepiento lo más mínimo, pero todo se me hace extraño. Como todo, es cuestión de tiempo...
¿La imagen que ilustra esta entrada? Nel blù, de Kandinsky. Será lo primero que verá la gente nada más entrar a mi salón.
Las sensaciones vuelven a ser confusas. Tras un primer momento de euforia, un segundo de cabreo porque el p... ordenador no quería arrancar, y un tercero de bienestar, la melancolía ha vuelto a hacerse un hueco en mi cocorota. Ayer me pasé todo el día pensando cosas en plan...esta es la última vez que... Me siento extraño todavía. Supongo que es cuestión de tiempo, pero me doy cuenta de que algo ha cambiado porque hago cosas que nunca hacía. Un ejemplo estúpido es el haberme puesto la radio de fondo. Jamás en mi vida lo había hecho, salvo esporádicas visitas vía web, pero hoy ha sido lo primero que he hecho una vez me he puesto cómodo. Supongo que es una inconsciente búsqueda de compañía...
La cama no me gusta. Es pequeña y blanda, por lo que pasa a ser prioritario el cambiarla. El sofá, tres cuartos de lo mismo, aunque en este caso ya tengo mirado su relevo. Pienso continuamente en qué estará pensando mi madre. Se me pasará, lógicamente, pero ahora no puedo evitarlo. Me ha apoyado y me ha empujado a dar este paso, pero los últimos días evitaba el tema, supongo que es normal. Para ella también va a ser su primera experiencia viviendo sola...
En fin, que es sólo el primer día del resto de mi vida, y ya no hay marcha atrás. No, no me arrepiento lo más mínimo, pero todo se me hace extraño. Como todo, es cuestión de tiempo...
¿La imagen que ilustra esta entrada? Nel blù, de Kandinsky. Será lo primero que verá la gente nada más entrar a mi salón.
jueves, 17 de febrero de 2011
The last night....
Últimas palabras desde la nave nodriza.....las sensaciones son encontradas, por un lado una felicidad inmensa, por otro una tristeza terrible....demasiado tiempo sin cortar el cordón umbilical...mañana, si Dios y Telefónica quieren, diré mis primeras palabras desde el que ya es mi nuevo hogar.
Gracias a todos los que me habéis animado a dar este necesrio paso, gracias en especial a Jorge, María, Sara y Lucía por el primer regalo que presidirá sin duda alguna mi salón. Gracias a Aixa, Maite y Rita por hacerme ejercer por vez primera de anfitrión, gracias mil a Pilar por poner a mi alcance esta maravilla de piso....gracias por aguantar esta locura que se ha gestado en 3 semanas, y que prometo continuar desde mi nuevo rinconcito. Gracias Esther y Carmen por ser como sois, espléndidas... gracias Alba por ser la persona que más me ha aguantado todas mis paranoias y por ese teléfono que ya no es un "Domo", es un "Alba" ;)...se que me dejo mucha gente, pero es el riesgo que tienen estas cosas..sentiros todos aludidos, al fin y al cabo este blog sólo lo leen mis AMIGOS, y si tu estás aquí, considérate uno de ellos.
Desde Avendida de Colón, se despide éste que os quiere mucho. Me voy....
Gracias a todos los que me habéis animado a dar este necesrio paso, gracias en especial a Jorge, María, Sara y Lucía por el primer regalo que presidirá sin duda alguna mi salón. Gracias a Aixa, Maite y Rita por hacerme ejercer por vez primera de anfitrión, gracias mil a Pilar por poner a mi alcance esta maravilla de piso....gracias por aguantar esta locura que se ha gestado en 3 semanas, y que prometo continuar desde mi nuevo rinconcito. Gracias Esther y Carmen por ser como sois, espléndidas... gracias Alba por ser la persona que más me ha aguantado todas mis paranoias y por ese teléfono que ya no es un "Domo", es un "Alba" ;)...se que me dejo mucha gente, pero es el riesgo que tienen estas cosas..sentiros todos aludidos, al fin y al cabo este blog sólo lo leen mis AMIGOS, y si tu estás aquí, considérate uno de ellos.
Desde Avendida de Colón, se despide éste que os quiere mucho. Me voy....
domingo, 13 de febrero de 2011
Last sunday
Hoy ha sido el último domingo que me he despertado en la que ha sido mi casa durante 43 años, 10 meses y 14 días, la que ya a partir de este momento pasa a ser la casa de mi madre. Y las sensaciones son confusas. Por un lado, feliz por abandonar al fin el nido (que ya iba siendo hora) pero por otro la tristeza lo inunda todo. Supongo que es normal, y más a estas alturas de la película. Los que ya dísteis este paso en su día probablemente pasásteis por esta misma sensación de desasosiego. Yo, además tengo el agravante de que nací aquí, a escasos dos metros y medio desde donde escribo estas las que pueden ser últimas líneas de este blog desde el que ya no es mi hogar.
Miro a mi alrededor y todo es nostalgia. Me cuesta coger cosas para llevármelas a la que va a ser mi casa en menos de una semana. Tengo una sensación extraña, como si, a pesar de ser mías, no me pertenecieran. Libros, discos, recuerdos.... Casi 44 años acumulando cosas que ahora me cuesta reconocer como mías. Dejo además a mi madre sola, y aunque se que cuento con todo su apoyo, sé también que no es precisamente el mejor momento. Una persona que ha sido todo energía durante toda su vida, desde hace unos meses ha pegado un bajón importante. Una palabra suya bastaría para quedarme, pero sé positivamente que no la dirá. Aunque lo esté deseando.
A partir de la próxima semana ya nada será igual en mi vida. Tengo en estos momentos la ilusión de un niño de 6 años en la noche de Reyes, pero no puedo contener la lágrima que contínuamente se me desliza por la mejilla. Muchos de los que me leéis lleváis casi dos décadas fuera del hogar materno, y probablemente se os hayan olvidado eastas sensaciones. Ni siquiera se cómo actuar el día que me marche definitivamente, casi seguro este próximo viernes, nunca más tarde.
Y eso que me voy a 300 metros de aquí, a dos manzanas. Y me he prometido venir a menudo, pero ya se sabe, esas promesas siempre se hacen, aunque casi siempre cuesta mucho cumplirlas. Intuyo, por otro lado, que habrá amigos que os hayáis sentido molestos por no pediros ayuda en la mudanza. No os lo toméis a mal, en el fondo he querido demostrarme que era capaz de hacer esto por una vez yo solito, tarde o temprano recurriré a vosotros, pero el paso inicial quería darlo por mí mismo.
En fin, que no quiero que las lágrimas por no ver el sol me impidan ver las estrellas. Ahora mismo, mi nivel de felicidad y de tristeza están a la misma altura. Se que al final, lo primero se improndrá a lo segundo.
Miro a mi alrededor y todo es nostalgia. Me cuesta coger cosas para llevármelas a la que va a ser mi casa en menos de una semana. Tengo una sensación extraña, como si, a pesar de ser mías, no me pertenecieran. Libros, discos, recuerdos.... Casi 44 años acumulando cosas que ahora me cuesta reconocer como mías. Dejo además a mi madre sola, y aunque se que cuento con todo su apoyo, sé también que no es precisamente el mejor momento. Una persona que ha sido todo energía durante toda su vida, desde hace unos meses ha pegado un bajón importante. Una palabra suya bastaría para quedarme, pero sé positivamente que no la dirá. Aunque lo esté deseando.
A partir de la próxima semana ya nada será igual en mi vida. Tengo en estos momentos la ilusión de un niño de 6 años en la noche de Reyes, pero no puedo contener la lágrima que contínuamente se me desliza por la mejilla. Muchos de los que me leéis lleváis casi dos décadas fuera del hogar materno, y probablemente se os hayan olvidado eastas sensaciones. Ni siquiera se cómo actuar el día que me marche definitivamente, casi seguro este próximo viernes, nunca más tarde.
Y eso que me voy a 300 metros de aquí, a dos manzanas. Y me he prometido venir a menudo, pero ya se sabe, esas promesas siempre se hacen, aunque casi siempre cuesta mucho cumplirlas. Intuyo, por otro lado, que habrá amigos que os hayáis sentido molestos por no pediros ayuda en la mudanza. No os lo toméis a mal, en el fondo he querido demostrarme que era capaz de hacer esto por una vez yo solito, tarde o temprano recurriré a vosotros, pero el paso inicial quería darlo por mí mismo.
En fin, que no quiero que las lágrimas por no ver el sol me impidan ver las estrellas. Ahora mismo, mi nivel de felicidad y de tristeza están a la misma altura. Se que al final, lo primero se improndrá a lo segundo.
viernes, 11 de febrero de 2011
Ya tengo línea. Continuamos para bingo.
Realmente, si no lo veo no lo creo. 13 horas después de acabar hasta los mismísimos contratando la línea de teléfono, podía haberla tenido instalada. Por aquello de que no había prisa lo he dejado hasta hoy, que me ha venido el tésnico a realizar la instalación. El susodicho ha resultado ser un excliente de la imprenta en la que curro, un argentino que intentó montar su propio negocio y que le salió el tiro por la culata, y que ha acabado en un subcontrata de Movistar. Un tipo majete, lo cual siempre facilita todo.
Lo primero que me ha llamado la atención es que yo pensaba que me estaban poniendo el teléfono...pues no. Al parecer lo que contraté fue la línea telefónica, no el aparato en sí, lo cual me ha dejado un tanto perplejo. Claro que la explicación que me ha dado ha sido además de evidente, contundente: nadie quiere ya los aparetejos que suministra la compañía telefónica, por una sencilla razón: te lo alquilan. ¿Y para qué pagar un par de euros más al mes pudiendo comprarte el modelo que te de la gana? Además, por lo que pude comprobar en el trabajo, cada nuevo modelo que sacan al mercado es peor que el anterior, y es que manda huevos que con cualquier móvil puedas hacer fotos de 8 Mpx o realizar una videoconferencia con Nueva Zelanda y los fijos siguen siendo en blanco y negro, y que no te permiten almacenar más de 20 números, eso si descubres cómo hacerlo.
La condición sine qua non que me había marcado para dar el gran salto ya está cumplida. Tengo cama, frigo, microondas e internet, lo básico para sobrevivir. Así que sin más demora he efectuado mi primera gran compra llena-despensas, mañana miro un sofá, y, salvo sorpresa, en menos de una semana estoy totalmente independizado.
Casi soy feliz...
Lo primero que me ha llamado la atención es que yo pensaba que me estaban poniendo el teléfono...pues no. Al parecer lo que contraté fue la línea telefónica, no el aparato en sí, lo cual me ha dejado un tanto perplejo. Claro que la explicación que me ha dado ha sido además de evidente, contundente: nadie quiere ya los aparetejos que suministra la compañía telefónica, por una sencilla razón: te lo alquilan. ¿Y para qué pagar un par de euros más al mes pudiendo comprarte el modelo que te de la gana? Además, por lo que pude comprobar en el trabajo, cada nuevo modelo que sacan al mercado es peor que el anterior, y es que manda huevos que con cualquier móvil puedas hacer fotos de 8 Mpx o realizar una videoconferencia con Nueva Zelanda y los fijos siguen siendo en blanco y negro, y que no te permiten almacenar más de 20 números, eso si descubres cómo hacerlo.
La condición sine qua non que me había marcado para dar el gran salto ya está cumplida. Tengo cama, frigo, microondas e internet, lo básico para sobrevivir. Así que sin más demora he efectuado mi primera gran compra llena-despensas, mañana miro un sofá, y, salvo sorpresa, en menos de una semana estoy totalmente independizado.
Casi soy feliz...
miércoles, 9 de febrero de 2011
He contratado el teléfono con Movistar...creo
Acabo de dar el paso definitivo para ir por fin a habitar mi casa: contratar la línea telefónica y el ADSL. Y lo he hecho con el artista antes conocido como Telefónica, que ahora respinde al nombre de Movistar.
Antes de nada, un consejo: si tenéis que contratar una nueva línea con la compañía que sea, paciencia, mucha paciencia...si no la tuvieres, correrás el riesgo de acabar desquiciado. Como ya comenté en otra entrada, cometí el error de interesarme por una nueva alta. Desde ese momento no han parado de darme el coñazo, hasta que hoy he decidido por fin hacerles caso.
Para empezar, resulta cuando menos curioso que una compañía telefónica líder en muchos países, un referente en las telecomunicaciones mundiales, tenga una calidad de sonido en sus llamadas tan aberrante. Hasta 3 veces he tenido que soportar el "cuelgue y le vuelvo a llamar, a ver si así..." Es como si vas a contratar un sistema de seguridad y en ese momento sufres un atraco en la misma tienda. Me llama una comercial, y tras pasarme con su supervisor, y éste con el supervisor del supervisor, le pido que me informe de las condiciones del contrato, lógicamente con la web de Movistar abierta para cerciorarme que no me estaban engañando. Y la primera...zas! en toda la boca!
¿Cómorrrr? El 10 Mb que veo en la pantalla es chirriante, por lo que no me queda más remedio que preguntarle de qué compañía me llama, y me aclara que de Telefónica Movistar, y tras hacerle un pequeño test de las condiciones del resto del contrato (algo que estaba viendo en pantalla) me he quedado más o menos convencido. Me informa que son 10 Mb, pero que sólo garantizan 6, dependiendo de la zona, la distancia a la central...lo típico. Tras aclararme (parte) de las condiciones del contrato, me instrucciona para la grabación que servirá como contrato, y me pasa con una cuarta intercomunicadora.
Ésta, sudamericana como los otros 3, me alecciona sobre la grabación que vamos a realizar, pero la calidad de la llamada es tan cutre-salchichera que le entiendo una palabra de cada cuatro que pronuncia. Tras desquiciarme yo y desquiciarse ella, me sugiere llamarme al móvil, a ver si así...Me sorprende de nuevo que la oferta que me proponen es más baja que la que veo como supermegapromoción en su web, ya que en vez de 40,87 €, me dice que son 35. Comienza la grabación y yo me siento como un novio ante el altar, teniendo que responder a todo "sí, acepto".
Finalmente me informa que en una semana un técnico se pondrá en contacto conmigo, y que en dos semanas recibiré el kit del ADSL para que me lo configure yo solito. Pregunto el porqué, y me dice que ha cambiado la forma de hacer las cosas, que el año pasado sí, pero este no....total, que acepto pulpo como animal de compañía, y tras colgar después de una hora al aparato, me quedo con la típica insegurdad tan propia en mí. ¿Habré hablado con Timofónica realmente o me la han metido doblada? La respuesta, en una semana....si Dios y Alierta quieren.
Antes de nada, un consejo: si tenéis que contratar una nueva línea con la compañía que sea, paciencia, mucha paciencia...si no la tuvieres, correrás el riesgo de acabar desquiciado. Como ya comenté en otra entrada, cometí el error de interesarme por una nueva alta. Desde ese momento no han parado de darme el coñazo, hasta que hoy he decidido por fin hacerles caso.
Para empezar, resulta cuando menos curioso que una compañía telefónica líder en muchos países, un referente en las telecomunicaciones mundiales, tenga una calidad de sonido en sus llamadas tan aberrante. Hasta 3 veces he tenido que soportar el "cuelgue y le vuelvo a llamar, a ver si así..." Es como si vas a contratar un sistema de seguridad y en ese momento sufres un atraco en la misma tienda. Me llama una comercial, y tras pasarme con su supervisor, y éste con el supervisor del supervisor, le pido que me informe de las condiciones del contrato, lógicamente con la web de Movistar abierta para cerciorarme que no me estaban engañando. Y la primera...zas! en toda la boca!
Le informo que usted está a punto de contratar una línea ADSL de 6 megas....
¿Cómorrrr? El 10 Mb que veo en la pantalla es chirriante, por lo que no me queda más remedio que preguntarle de qué compañía me llama, y me aclara que de Telefónica Movistar, y tras hacerle un pequeño test de las condiciones del resto del contrato (algo que estaba viendo en pantalla) me he quedado más o menos convencido. Me informa que son 10 Mb, pero que sólo garantizan 6, dependiendo de la zona, la distancia a la central...lo típico. Tras aclararme (parte) de las condiciones del contrato, me instrucciona para la grabación que servirá como contrato, y me pasa con una cuarta intercomunicadora.
Ésta, sudamericana como los otros 3, me alecciona sobre la grabación que vamos a realizar, pero la calidad de la llamada es tan cutre-salchichera que le entiendo una palabra de cada cuatro que pronuncia. Tras desquiciarme yo y desquiciarse ella, me sugiere llamarme al móvil, a ver si así...Me sorprende de nuevo que la oferta que me proponen es más baja que la que veo como supermegapromoción en su web, ya que en vez de 40,87 €, me dice que son 35. Comienza la grabación y yo me siento como un novio ante el altar, teniendo que responder a todo "sí, acepto".
Finalmente me informa que en una semana un técnico se pondrá en contacto conmigo, y que en dos semanas recibiré el kit del ADSL para que me lo configure yo solito. Pregunto el porqué, y me dice que ha cambiado la forma de hacer las cosas, que el año pasado sí, pero este no....total, que acepto pulpo como animal de compañía, y tras colgar después de una hora al aparato, me quedo con la típica insegurdad tan propia en mí. ¿Habré hablado con Timofónica realmente o me la han metido doblada? La respuesta, en una semana....si Dios y Alierta quieren.
domingo, 6 de febrero de 2011
Los chinos, ese gran aliado
Poco a poco, mi casa (qué bien suena el adjetivo posesivo...) va tomando forma, y queda muy poquito para que me instale de forma definitiva. Hoy, en una de mis incontables expediciones a la misma llevando cosas, he decidido hacer una pausa para ordenar los canales de la TDT y de paso, estrenar mi modesta cafetera. Y ha sido en ese momento cuando me he dado cuenta de un tonto detalle: tenía azúcar, pero no azucarero. Además, el paquete del mismo era en tetrabrick, por lo que no había opción de meter la cucharilla, así que he tenido que volcar el mismo para echar una cantidad indefinida de azúcar.
Es curioso, cuando llevas mucho tiempo viviendo en una casa, y más si es la de tus padres, este tipo de cosas no pasan: hace muchos años que en casa de mi madre hay un azucarero. Pero me he dado cuenta de que pasará un tiempo descubriendo cosas tan tontas como esta. Afortunadamente, para estas situaciones tenemos la solución: las tiendas de chinos.
Herederas de los viejos "todo a 100", cada vez es más raro no tener uno de estos establecimientos cercano a tu hogar. Además, como se pasan la legislación por el arco del triunfo, abren cuando les sale de los cojones, por lo que esta tarde de domingo ha sido perfecta para visitar uno de esos paraísos de la chuminada.
Resulta fascinante pasear por sus estrechos pasillos fijándote en la cantidad de cosas diferentes que aglutinan, desde la estupidez más recalcitrante en forma de gato bajando el brazo, hasta la más insospechada herramienta de bricolaje. Hay de todo, como en botica. Así que he echado de menos un carrito como el de los supermercados para hacerme con la cantidad de cosas que no había caído en que no tenía. Y al final te haces con esas y con otras muchas que luego no entiendes el porqué de tu adquisición (¿para qué narices quiero yo un cepillo para el pelo si me lo dejo casi rapado cada cuatro semanas?). Pero, a pesar de ello, te marchas feliz, por que te llevas una docena de objetos por un precio ridículo. Que probablemente no duren dos semanas, pero esa es otra historia.
Es curioso, cuando llevas mucho tiempo viviendo en una casa, y más si es la de tus padres, este tipo de cosas no pasan: hace muchos años que en casa de mi madre hay un azucarero. Pero me he dado cuenta de que pasará un tiempo descubriendo cosas tan tontas como esta. Afortunadamente, para estas situaciones tenemos la solución: las tiendas de chinos.
Herederas de los viejos "todo a 100", cada vez es más raro no tener uno de estos establecimientos cercano a tu hogar. Además, como se pasan la legislación por el arco del triunfo, abren cuando les sale de los cojones, por lo que esta tarde de domingo ha sido perfecta para visitar uno de esos paraísos de la chuminada.
Resulta fascinante pasear por sus estrechos pasillos fijándote en la cantidad de cosas diferentes que aglutinan, desde la estupidez más recalcitrante en forma de gato bajando el brazo, hasta la más insospechada herramienta de bricolaje. Hay de todo, como en botica. Así que he echado de menos un carrito como el de los supermercados para hacerme con la cantidad de cosas que no había caído en que no tenía. Y al final te haces con esas y con otras muchas que luego no entiendes el porqué de tu adquisición (¿para qué narices quiero yo un cepillo para el pelo si me lo dejo casi rapado cada cuatro semanas?). Pero, a pesar de ello, te marchas feliz, por que te llevas una docena de objetos por un precio ridículo. Que probablemente no duren dos semanas, pero esa es otra historia.
viernes, 4 de febrero de 2011
Una casa sin cafetera no es un hogar
Prosigo poniendo cruces a las cosas que me faltan para por fin disfrutar de mi hogar, y hoy he conseguido dos fundamentales: por un lado me han venido a revisar la caldera y ya tengo calefacción, y por otro y no menos importante, me he pillado una cafetera. Dormir caliente + café por la mañana: ya puedo mudarme.
Hoy he dado grandes pasos. Por un lado, me han transferido la cuenta del gas, y he comprobado que lo de Iberdrola, contra los que despotricaba en un artículo ya borrado, no era por el traspaso de papeles, sino la deuda del anterior inquilino, lo cual ya tengo solucionado. Por otro, he ido a mirar electrodomésticos. Me he pillado la cafetera de la foto, la Nespresso tendrá que esperar. Acostumbrado a los que me sirve Cati, la rumana del bar de al lado del curro, cualquier cosa me parecerá buena ;) Y he echado un ojo a un frigo y a una tele. Me he dejado guiar por mi instinto, y he pasado de la tienda que toma por tontos a todos aquellos que no compren en ella y me he ido a un clásico en Logroño: Osaba. Para empezar, la puñetera cafetera en la que me fijé en el centro comercial me ha salido un 30% más barata. Y además, el frigorífico y la tele que he pillado son un chollito por un precio bastante más que apañado.
Mañana, trasvase de ropa de verano y algún que otro libro. Esto último va a ser una putada, porque apenas tengo estanerías donde colocarlos, pero bueno, poco a poco. Y si no, ahí está mi trastero de 2x1 (metros) para amontonar cosas.
Hoy he dado grandes pasos. Por un lado, me han transferido la cuenta del gas, y he comprobado que lo de Iberdrola, contra los que despotricaba en un artículo ya borrado, no era por el traspaso de papeles, sino la deuda del anterior inquilino, lo cual ya tengo solucionado. Por otro, he ido a mirar electrodomésticos. Me he pillado la cafetera de la foto, la Nespresso tendrá que esperar. Acostumbrado a los que me sirve Cati, la rumana del bar de al lado del curro, cualquier cosa me parecerá buena ;) Y he echado un ojo a un frigo y a una tele. Me he dejado guiar por mi instinto, y he pasado de la tienda que toma por tontos a todos aquellos que no compren en ella y me he ido a un clásico en Logroño: Osaba. Para empezar, la puñetera cafetera en la que me fijé en el centro comercial me ha salido un 30% más barata. Y además, el frigorífico y la tele que he pillado son un chollito por un precio bastante más que apañado.
Mañana, trasvase de ropa de verano y algún que otro libro. Esto último va a ser una putada, porque apenas tengo estanerías donde colocarlos, pero bueno, poco a poco. Y si no, ahí está mi trastero de 2x1 (metros) para amontonar cosas.
miércoles, 2 de febrero de 2011
Wherever I Lay My PC (That's My Home)
Prosigo con mi, sin prisa pero sin pausa, mudanza a mi nuevo hogar. Lo principal ya está allí, lo que cualquier hombre se llevaría en primer lugar: la colección de Asterix y los CD's. El frigo ya está lleno de cervezas para las visitas, y hay papel higiénico en el baño. Tengo platos, cubiertos, vasos...mi casita va tomando forma. Todo concluirá con el trasvase de mi PC.
El departamento sudamericano de Timofónica ya está al loro de mi futura nueva línea, por lo que no dudan en masacrarme a llamadas. Advertidos por mí de que en breve tendría que disponer de ADSL, y a pesar de que les dije que me llamaran en 15 días, no han podido aguantar hasta entonces. Usted nos comentó, usted nos dijo que quería una nueva alta... la llamada de ayer fue alucinante a la par que agobiante: tres sudamericanos tres se fueron pasando el teléfono para intentar convencerme de lo feliz que iba a ser si me daba de alta YA, amenazándome con la demora de 15 días que iban a tener sus técnicos en instalarme la línea (algo tan complicado como hacer clic en la toma de teléfono que tengo y listo).
Pero es que, cuado un vendedor tiene prisas por encajarte su producto, a mí me da por pensar mal. He sido vendedor (o, eufemísticamente hablando, comercial) durante muchos años, y quieras que no, te conoces las tácticas. Y ninguno de los tres personajes que tuve al otro lado del teléfono, ninguno, me habló de las ofertas por una línea nueva. El típico si cuela, cuela. Como dicen en la publicidad de Media Markt, yo no soy tonto, y obviamente voy a la web del imperio movistariano y me encuentro con que, si contrato línea nueva tengo alta de línea, de ADSL y router Wi-Fi gratis, y pago 26,90 al mes durante un año. Y eso se lo tuvieron muy calladito los tres "no se retire por favor" que me atendieron.
Así que, una de dos, me pasaré por una tienda Movistar o llamaré al 1004 para contratar sus servicios. Y por supuesto dejaré caer la fantástica (y ficticia) oferta que me ha hecho ONO para que me doren la píldora. Y esperaré ansioso la llamada de mis acosadores para darles en todo el morro.
La cuenta atrás ha comenzado. En una de mis últimas intervenciones desde casa de mi madre, se despide este fiel servidor de todos ustedes. Cuando tenga línea, tendré mi nuevo hogar.
El departamento sudamericano de Timofónica ya está al loro de mi futura nueva línea, por lo que no dudan en masacrarme a llamadas. Advertidos por mí de que en breve tendría que disponer de ADSL, y a pesar de que les dije que me llamaran en 15 días, no han podido aguantar hasta entonces. Usted nos comentó, usted nos dijo que quería una nueva alta... la llamada de ayer fue alucinante a la par que agobiante: tres sudamericanos tres se fueron pasando el teléfono para intentar convencerme de lo feliz que iba a ser si me daba de alta YA, amenazándome con la demora de 15 días que iban a tener sus técnicos en instalarme la línea (algo tan complicado como hacer clic en la toma de teléfono que tengo y listo).
Pero es que, cuado un vendedor tiene prisas por encajarte su producto, a mí me da por pensar mal. He sido vendedor (o, eufemísticamente hablando, comercial) durante muchos años, y quieras que no, te conoces las tácticas. Y ninguno de los tres personajes que tuve al otro lado del teléfono, ninguno, me habló de las ofertas por una línea nueva. El típico si cuela, cuela. Como dicen en la publicidad de Media Markt, yo no soy tonto, y obviamente voy a la web del imperio movistariano y me encuentro con que, si contrato línea nueva tengo alta de línea, de ADSL y router Wi-Fi gratis, y pago 26,90 al mes durante un año. Y eso se lo tuvieron muy calladito los tres "no se retire por favor" que me atendieron.
Así que, una de dos, me pasaré por una tienda Movistar o llamaré al 1004 para contratar sus servicios. Y por supuesto dejaré caer la fantástica (y ficticia) oferta que me ha hecho ONO para que me doren la píldora. Y esperaré ansioso la llamada de mis acosadores para darles en todo el morro.
La cuenta atrás ha comenzado. En una de mis últimas intervenciones desde casa de mi madre, se despide este fiel servidor de todos ustedes. Cuando tenga línea, tendré mi nuevo hogar.
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